Miguel Alejo, delegado de Gobierno de Castilla y León, aseguró el pasado 26 de octubre que la situación actual es consecuencia de una crisis de "ética,de valores, actitudes". El político ha renunciado a su pensión por jubilación como funcionario en su labor de inspector de educación mientras mantiene su puesto político, explica así que no se aprovechará del sistema que le permite el cobro de una pensión compatibilizada con la asignación correspondiente a su cargo como delegado de gobierno. Hace un llamamiento a la coherencia que debería imperar en las actividades políticas y destaca la importancia de que los directores de las cajas asuman la responsabilidad social que les corresponde.
http://www.20minutos.es/noticia/1200410/0/
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